En un partido sin muchas emociones Holanda superó a Dinamarca 2-0 en el primer partido de lunes correspondiente al Grupo E del Mundial Sudáfrica 2010.
Y aunque el marcador pudiera sugerir mayor emotividad, no lo fue así ya que los goles de Holanda fueron el primero debido a un autogol y el segundo ya casi al terminar el partido y de una manera circunstancial.
No convenció la naranja mecánica que no mostró lo que se esperaba de un conjunto de su jerarquía, sin embargo con todo y eso se lleva los tres puntos y se coloca en primer lugar en su grupo esperando lo que hagan más tarde Japón y Camerún.
Nota de gol.com
HOLANDA GANA Y DECEPCIONA
Holanda-Dinamarca (2-0)
Por Iago Lago.-
Holanda vence a Dinamarca por 2-0 en un partido que se podría resumir con la palabra decepción. El partido había generado mucha expectación por la esperanza de ver en el Mundial juego abierto y de ataque, algo que, hasta el momento, sólo nos ofreció Alemania.
Con Kuyt dando cabezazos en su área y centrando balones desde la banda, Van Persie peleado consigo mismo, Sneijder rompiendo el Jabulani y De Jong las piernas del rival, Holanda no funcionó. El doble pivote formado por Van Bommel y De Jong tiene menos fútbol que el patadón p'alante de Clemente, mientras que Sneijder no se basta para generar en la mediapunta y Van der Vaart no existe por la izquierda. Si a esto se le suman las incesantes caídas de Kuyt atrás y a los lados y la irrelevancia de un Van Persie que pudo haberse quedado en casa, nos quedamos con una selección holandesa que no juega y, por lo tanto, que no es Holanda ni es selección. La cara de Cruyff en el palco simplificaba todo.
El inicio del partido fue prometedor. Holanda, aunque poco a poco, comenzó tocando sin prisa, pero sin pausa, buscando a cada paso la portería rival e intentando ponerse por delante en el marcador.
A pesar de esto, Dinamarca no se quedaba atrás y, aunque a la contra, a cada ataque holandés le respondía una contra danesa que, curiosamente, llevaba siempre más peligro que la ofensiva rival inicial.
Los ataques holandeses no llevaban demsiado peligro, terminando casi todos con extraños centros de Kuyt que nadie remataba o disparos lejanos que Sneijder enviaba al séptimo cielo. Dinamarca, por contra, apostaba por rápidas contras en las que Bendtner siempre tenía algo que ver y, al contrario que los rivales, las contras danesas siempre encontraban portería e hicieron emplearse a fondo a Stekelemburg.
Poco a poco, el juego se fue apagando y así llegó el segundo tiempo. Una desafortunadísima jugada defensiva de Dinamarca trajo el desastre al partido. Simon Poulsen cabeceó de forma muy inocente en su área y el despeje golpeó en la espalda de Agger antes de tomar el camino del autogol.
Aquí llegó la sorpresa holandesa. Con el marcador a favor, Holanda se replegó y especuló con el partido, algo poco habitual en la tradición futbolística de la Oranje. Además, sin ataques holandeses, dejaron de existir las contras danesas, por lo que el partido se tornó en infumable hasta su conclusión.
Thomas Enevoldsen Dinamarca
Sólo la entrada de Elia puso algo de picante al partido. La velocidad y descaro del futbolista de la Bundesliga llegó a Kuyt a marcar el segundo tras un rechace generado por él. El encuentro terminó y Holanda se marcha con muchos puntos y poco juego de su primer partido mundialista. Dinamarca, por su parte, se la jugará contra Japón y Camerún.
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